Un Ritual lleno de Pasion y Amor

"Te reclamo como mi compañera. Te pertenezco. Te ofrezco mi vida. Te doy mi protección, mi fidelidad, mi corazón, mi alma y mi cuerpo. Tu vida, tu felicidad y tu bienestar serán lo más preciado y estarán por encima de todo siempre. Eres mi compañera, unida a mí para toda la eternidad y siempre bajo mi cuidado”



viernes, 25 de noviembre de 2011

Peligro Oscuro/Escena Eliminada 3

Peligro Oscuro –Escena eliminada 3



Solange colocó la mano sobre el estómago redondeado de Jasmine.
-Ya no falta mucho, Jasmine. ¿Has tenido algún problema? Debería haberte comprobado más a menudo. Te lo juro, el tiempo pasa volando en la selva.
Su prima más joven le sonrió y negó con la cabeza.
-He estado muy bien. Se acabaron las nauseas, gracias a Dios. Todo el mundo me ha ayudado mucho, pero estábamos preocupados por ti. 
Solange agachó la cabeza. Juliette y Jasmine había pasado toda su vida preocupándose por ella igual que había hecho ella. Tal vez tener a Dominic como compañero la hacía más consciente de la gente que la quería y cómo tenía que ser para ellos cuando desaparecía durante largos períodos de tiempo sin ninguna palabra y sin modo de saber si estaba viva o muerta.
-Lo siento, Jasmine, debería haber intentado encontrar un modo de informaros de que estaba a salvo.
La sonrisa de Jasmine se hizo más grande y se convirtió en una sonrisa burlona.
-O por lo menos que encontraste un bombón en la selva.
Solange miró a Dominic, deseando tener tiempo para bromear y visitar a sus primas. Siempre estaría un poco incómoda dentro de una casa, siempre incómoda en presencia de los hombres. Incluso la familia de su prima, que técnicamente era suya. Pero quería pasar un poco de tiempo con estas mujeres que amaba.
Miró a su alrededor, apretando los labios con fuerza. Parecía que nunca llegaba con buenas noticias. Jasmine estaba casi fuera de cuentas, y sin embargo, ni siquiera ahora, podía descansar y sentirse segura.
-¿Qué pasa? -Preguntó Nicolás. Se acercó en silencio detrás de su compañera, Lara y puso una mano con suavidad en su nuca.
El ambiente en la habitación cambió de la alegre celebración a sombrío en un instante. Solange negó con la cabeza y apretó la mano de Jasmine, permaneciendo cerca de ella. Juliette se acercó al otro lado de su hermana muy embarazada. El compañero de Juliette, Riordan, le puso una mano en los hombros en gesto de consuelo.
-Traemos la noticia de un ataque, a gran escala y bien planeado a vuestra casa y la de la gente que trabaja aquí. Va a ser el entrenamiento antes de que Malinov envíe a su ejército contra el príncipe. Zacarías estará allí fuera. -Dominic hizo un gesto hacia la selva-. Donde será más útil. Vendrán pronto y hay que preparar a los que os son leales para la batalla, porque estad seguros que nos pisan los talones.
-Has utilizado la palabra "ejército", Dominic -dijo Rafael-. ¿Cuántos vienen? ¿Tienes alguna idea del número? 
Dominic negó con la cabeza.
-Tengo la sensación de que tenemos un problema en nuestras manos. Tenemos que estar preparados para oleadas de vampiros y quizá títeres humanos durante el día si no los derrotamos inmediatamente. La buena noticia es que no tienen idea de que conocemos su plan.
-Jasmine no puede quedarse aquí -dijo Juliette-. Solange, tienes que llevarla a un lugar seguro.
Jasmine sacudió la cabeza.
-No. Estoy cansada de ser el eslabón más débil, Juliette. Solange siempre es quien se enfrenta a nuestros enemigos. Puedo pelear tan bien como cualquier otro si tengo que hacerlo. Soy capaz de utilizar algunas de las armas que Riordan ha desarrollado para los trabajadores y matar vampiros. Practicamos todo el tiempo. Sé que hacer. 
-Pero... -Juliette volvió el rostro hacia Riordan, quien inmediatamente la atrajo hacia sí-.¿Estás segura Jasmine? Solange puede sacarte de aquí, sabes que puede. 
Solange no estaba tan segura como Juliette.
-Aquí tenemos seis varones y seis hembras cárpatos. No he perdido mi habilidad para enfrentarme al día, y Dominic es capaz también. 
Nicolás frunció el ceño.
-¿Cómo es eso posible?
-Tiene algo que ver con la sangre de Solange -respondió Dominic, consciente de que Solange estaba muy incómoda siendo el centro de atención-. No puedo permanecer tanto como Solange. Hemos experimentado un poco y todavía nos ataca la debilidad de los cárpatos, nuestro cuerpo se convierten en plomo cuando el sol está en su punto más alto. Pero tenemos más horas por la mañana y la tarde. Eso podría ayudarnos.
Nicolás siguió frunciendo el ceño, con una expresión pensativa.
-¿Podemos compartirlo nosotros, si intercambiamos sangre contigo?
Solange trató de no retorcerse ante la idea. Se obligó a enderezarse, sin cambiar la expresión. No importaba lo mucho que quisiera estar cómoda en presencia de hombres tan abrumadores y poderosos, sabía que nunca lo sería.
-Yo les daría mi sangre si eso te angustia.
Cada nudo de su estómago se soltó, se calmó. Allí estaba, ese tono de terciopelo que la acariciaba por dentro, donde nadie podía ver. Dominic. Su compañero. Lo saboreó en la lengua. Estaba a su lado, hombro con hombro. Delante de ella o detrás de ella, siempre iba a estar allí con ella.
-Estamos más que dispuestos a compartir la sangre con vosotros, Nicolás -dijo Solange, sabiendo que con Dominic podría hacer lo que había que hacerse, incluyendo el intercambiar su extraña sangre con los otros machos-. Pero no puedes contar con que os sirva sin probar las limitaciones.
-Y los efectos parecen ser acumulativos. Le dio sangre a Zacarías, pero no parecía surtir efecto en él -agregó Dominic-. Así que no sé con quién va a funcionar y cómo.
Nicolás tomó la mano de Lara.
-Vamos a hablar con los trabajadores y darles la opción de decidir por sí mismos si se quedan o se van, sin repercusiones posteriores. Esta no es una lucha humana, e incluso con toda la formación que les hemos dado, están en desventaja. En cualquier caso, deben llevar a sus mujeres e hijos a un lugar seguro. Rafael, tú y Dominic elaborar un plan de batalla. Manolito, protege las estructuras. Riordan, encárgate del ganado. -Volvió la cabeza, sus ojos se encontraron con los de Jasmine-. Hermanita, vas a hacer lo que te digan. Eres preciosa para todos los de esta habitación. Tienes un hijo que proteger.
Jasmine negó con la cabeza, con lágrimas en sus ojos.
-No me envíes lejos de todos mis seres queridos, Nicolás. Eso me ha ocurrido muchas veces en mi vida y todo se destruye, todos los que me importan mueren o son heridos. Necesito estar aquí. Puedo usar las armas. No soy una niña.
-Nadie ha dicho nada sobre que seas una niña –dijo Solange con suavidad.- Está diciendo que tenemos que saber porque estamos luchando y tú eres nuestra razón.
-Luiz y Josef llevarán a Jasmine al interior de la cámara acorazada en el momento que ataquen. Ningún vampiro puede entrar  -ordenó Nicolás-. Sin dudas, Luiz. Si es necesario, llévala y mantenla allí. Josef, espero que me obedezcas en todo esto. Tú la protegerás.
Josef parecía rebelde.
-Soy cárpatos y experto en la batalla. Dejarás que los humanos luchen contra los vampiros y, sin embargo, esperas que yo me esconda. Puedo parecer un niño…
-Te dije que me obedecieras y lo dije en serio. Sólo el hecho de que discutas conmigo mientras los demás se apresuran a asegurar el complejo es  suficiente para demostrar que eres demasiado joven para participar en la batalla real.
 Josef se ruborizó y agachó la cabeza. Incluso las puntas de sus orejas estaban rojas.
 Dominic se acercó a él.
-¿Has olvidado que eres el único de nosotros capaz de descifrar la encriptación que sacamos del laboratorio Morrison? Necesitamos ese material para proteger a las mujeres inocentes, para asegurarnos que ni un solo hombre que tenga una compañera potencial entre esas mujeres se pierda. Esa es una gran responsabilidad, Josef, y se encuentra únicamente en tus manos. No olvides nunca su importancia para tu pueblo. Jugar a ser el héroe y conseguir que te maten sería absurdo dadas las circunstancias. ¿No te parece?
 Josef encogió los hombros delgados pero pareció mucho más feliz.
-Sí. Olvidé por un momento lo importante que era. Estoy en ello, Dominic, puedes contar conmigo.
-Todos contamos contigo, Josef -dijo Dominic.
El chico hinchó el pecho. Solange se encontró sonriendo. Donde los hermanos De La Cruz eran más como ella, molestos por tener que explicárselo al chico, Dominic era paciente y había reforzado la confianza del Josef con unas pocas palabras sencillas. Ella realmente necesitaba aprender esos trucos.
-Obviamente vas a ser el mejor padre, Dominic -admitió ella-. Eso fue agradable de tu parte.
-Todo lo que dije era verdad. Él quiere ser un cazador, pero su verdadera arma es su cerebro y el hecho de que abarca el mundo moderno, como ninguno de nosotros lo hace. Le necesitamos. Él necesita saber que se le necesita.
Solange le amó aún más por esa observación

Peligro Oscuro/Escena Eliminada 2

Peligro Oscuro –Escena eliminada 2



Dominic echó un vistazo en Solange mientras se aceraban a la casa principal de los De La Cruz. Envió su llamada por delante hacia los hermanos y, como Solange, supo que fueron cuidadosamente inspeccionados mientras se acercaban a su destino. Ella se alejó sólo un poco, dándole espacio  para luchar por si era necesario. Estaba vestida con su traje de guerrera, vaqueros y una camiseta, el pelo hacia atrás en una trenza severa. Parecía totalmente seria, los ojos inquietos, buscando constantemente trampas ocultas. Dominic pensó que era absolutamente hermosa.
Se movía sobre cada obstáculo con fluida gracia, fluyendo sobre el suelo en silencio absoluto. El contraste entre su guerrera y su mujer era absoluto, y la cosa más sexy del mundo para él. Solange era fiable en un combate, tan fiable como cualquier cazador Cárpato con quien se hubiera topado. Su poder podría no ser el mismo, pero su valor y su determinación sí.
Estás nerviosa. Utilizó su forma más íntima de comunicación. Ella ni le miró. No traicionó que él había hablado con ella ni por un mínimo cambio de expresión.
-No tienes ni idea de las burlas que voy a recibir de mis primas. Juliette y Jasmine se partirán de risa al ver que tengo un hombre. Y MaryAnn, que es la consejera de mujeres que ha estado trabajando con Jasmine, es la mujer más femenina que he visto nunca. Quiso que me pintara las uñas de las manos… y de los pies. ¿Te lo puedes imaginar?
-Mmm -especuló con un vez como de terciopelo oscuro-. Las posibilidades son asombrosas.
Eso le ganó una mirada de censura por el rabillo del ojo.
-Mejor que no las incites, Dominic. O te encontrará en el suelo llorando como una chica.
-Sólo puedo esperar ese acontecimiento. Contén a tu gatito. Cree que va a cazar a Manolito, quien podría llevarse una impresión equivocada de él.
La mirada de Solange buscó a su gatito.
-Sombra, ven aquí.
-Vaya, tío Manolito, mira esto –sonó la voz de un joven.
Un muchacho esbelto de edad indeterminada salió precipitadamente de los arbustos directo hacia Sombra. El gatito saltó en el aire, gruñendo una advertencia, su cuerpo se volvió insustancial. Un momento era sólido y el siguiente no era nada más que una sombra escabulléndose entre la maleza hacia Solange y Dominic.
-Veriak ot en Karpatiiak, por la sangre del Príncipe -juró Manolito-. Josef, vuelve aquí donde puedo protegerte.
Era demasiado tarde, el chico ya estaba en el claro y luego desvaneciéndose detrás del gato sombra.
-¿Lo has visto? De verdad, tío Manny, era una clase de gato gravemente enfermo.
Solange fulminó al chico, deslizó la mano hacia su arma mientras la cabeza del chico entraba y salía de los arbustos, siguiendo al gatito.
-Mi gato no está enfermo –gritó-. Déjale en paz antes de que lo asustes y te hiera. ¿No sabes que es mejor no perseguir a un pobre gatito entre los arbustos?
-Aparta tu mano del arma, Solange -aconsejó Dominic.
Ella bufó con desprecio.
-Manolito. -Su voz cambió-, tío Manny, me conoces muy bien. Si ese idiota toca a mi bebé, me vengaré y será sangriento. Llámale.
-Como si tuviera alguna autoridad sobre él –murmuró Manolito-. Le calentaría las orejas, pero MaryAnn dice que necesita encontrarse. Sigue y encárgate de él, Solange. Estoy contigo.
-¿Este es tu genio, Dominic? –preguntó Solange cuando una mancha negra grisácea corrió hacia ella, ocultándose detrás, su cuerpo iba de la transparencia a la sustancia y transparente otra vez, las orejas aplastadas y moviendo la cola, indicando su agitación-. ¿Este chico desconsiderado que persigue a mi gatito?
Josef se detuvo bruscamente delante de ella, quitándose hojas de la camisa. Le sonrió con ojos brillantes, la pasó para mirar al gatito que siseaba y escupía.
-Totalmente enfermo. Impresionante, Dominic. ¿Dónde le has encontrado?
-No está enfermo -repitió Solange-. Sucede que es un gato sombra y se supone que tiene que tener ese aspecto.
-Enfermo es bueno, como guay, ya sabes. –Dijo Josef, haciendo gestos con la mano con desdén. Intentó rodear a Solange pero ella se deslizó con él, bloqueando fácilmente su camino. Él parpadeó como si la viera por primera vez. Le dirigió una sonrisa encantadora.
Solange nunca había visto a nadie como él. Tenía el pelo de punta, ojos traviesos, una oreja perforada y un collar y pulsera de puntas. Entrecerró los ojos, lanzándole su mirada más intimidatoria, ignorando a Dominic, que se había movido para insertar ligeramente su forma más grande entre ella y el chico. Solange adivinó que estaba a comienzos de los veinte, pero parecía más joven. A pesar de su apariencia extraña, tenía un aspecto inocente.
-¿Quien eres exactamente? -preguntó.
Manolito bufó. Dominic retorció el labio. Ella les fulminó a ambos y puso una mano tranquilizadora sobre la cabeza de Sombra. El gato se frotó contra su pierna, empujándola con suficiente fuerza como para hacerle dar un paso.
Josef no pareció molesto en lo más mínimo por su pregunta.
-Soy un macho cárpato. ¿Quien eres tú?
Dominic gruñó una advertencia.
-Cuida tus modales, chico.
-Supongo que es una pregunta legítima, dado que yo le pregunté. –Dijo Solange-. Soy su compañera. Cualquiera lo habría pensado.
Manolito pareció asustado. Más que asustado. Conmocionado.
-¿Estás bromeando, Solange? ¿Tú con un hombre?
-Aquí viene. Prepárate -advirtió Solange a Dominic.
Seguro que sus primas, Juliette y Jasmine, estaba saliendo a toda prisa de la casa. Juliette era la compañera de Riordan de La Cruz.
-Chismoso –siseó Solange a Manolito.
Éste le sonrió burlonamente.
-Ves como son todos, Dominic –Le confió Solange en voz tan alta que Manolito no podía dejar de oír su queja.
-¿Ahora quién es chismosa? –Se burló Manolito.
Solange se preparó mientras Juliette se lanzaba sobre su prima, empujándola hacia atrás. Solange se apoyó en una pierna para evitar que ambas cayeran, golpeando al gatito que siseaba y tropezó agarrándose a su prima. Las dos cayeron juntas, Solange aterrizando de culo. Juliette encima de ella y el gatito se lanzó sobre su cabeza.
Solange fulminó a Dominic con la mirada, quien no cambió de expresión, pero ella le podía oír riendo en su mente.
-Podrías haber ayudado -acusó.
-Cierto, pero nunca te he visto así.
-¿Cómo? -Entrecerró los ojos.
-Aturdida.
-Recuerda que estoy armada -advirtió.
Él le ofreció una sonrisa y apartó al gatito de Juliette para que ambas pudieran ponerse de pie. Solange se levantó de mala gana para echar una mirada a su familia. Todos sonreían como idiotas, igual que Dominic. Deseó que la tierra se abriera y la tragara, y no fue hasta varios minutos más tarde que recordó que realmente podía hacer que sucediera.

Peligro Oscuro/Escena Eliminada 1

Peligro Oscuro-Escena Eliminada 1


El "pequeño" gatito se arrastraba en silencio entre el follaje denso, los ojos fijos en el cuello de su presa. Aprender a cazar era más diversión que trabajo. Utilizó la forma de avanzar lenta, un centímetro a la vez, su cuerpo flexible y fuerte, quince kilos de puro músculo, volviéndose casi visible en cada acercamiento. Cuando estaba emocionado, no siempre podía mantener su sustancia, deslizándose cada vez más a la forma de gato de sombra que era. 
La mujer se movió en silencio por la selva tropical, aparentemente sin destino, caminando de esa manera extraña, fluida y silenciosa que tenía. El latido de su corazón resonó por su cuerpo. Él oyó el modo en que la sangre fluía como la tentación más grande que le corría por las venas, una llamada al hambre que no disminuiría. Ella se detuvo. Su oportunidad. Se agachó, preparado para abalanzarse.
Dominic saltó entre el gatito de sombra y Solange, golpeando al gato mientras atacaba.
-Él todavía tiene instintos, Solange, y es peligrosos, por más que quieras salvarlo.
Solange se dio la vuelta ante el sonido del gatito que siseaba su disgusto. Instantáneamente el siseo se convirtió en ronroneo y el gatito corrió hacia ella, se frotó contra sus piernas con tanta fuerza que casi la tiró.
Solange suspiró mientras se agachaba para rascar al gatito entre las orejas.
-Sólo para mí, Dominic. Nunca ha perseguido a nadie más muy cerca de nosotros. Deliberadamente lo he llevado cerca de los otros mientras les pasábamos y  no ha mostrado el menor interés.
Dominic se apartó. Ella podía tocar fácilmente sus pensamientos, pero también estaba demasiado ocupada tratando de descifrar cómo combatir mejor la necesidad  del gatito por su sangre para preocuparse por la reacción de Dominic, y eso era lo era debería haberla preocupado más.
El gato iba a crecer y volverse bastante grande, y cuando lo hiciera, la habilidad de convertirse en sombra a voluntad seguramente mejoraría y el animal sería mortal… para Solange. No podía correr más riesgos con su vida. No importaba cuánto le gustara a ella el gatito, su vida era mucho más importante.
-Solange… -empezó.
Esta sacudió la cabeza.
-Sé lo que vas a decir, Dominic. Yo también he pensado en los peligros.
-Más pronto o más tarde, si está separado de ti, puede decidir tomar la sangre de otra persona y puede matarlos.
-Nosotros tomamos sangre. La necesitamos para sobrevivir igual que él. Pero tú has entrado en él, como yo he hecho, para tratar de reparar todo el daño. Mi sangre llena todos esos espacios vacíos, y quizá tenga necesitada por esa causa. Mientras tanto, lo entrenaremos.
-Ya lo sabes, Solange -corrigió Dominic con suavidad-. Fue criado para encontrarte, para tomar tu sangre específicamente. Es una amenaza definida contra ti y está creciendo rápidamente.
Solange se quedó en silencio unos momentos, acariciando al gatito ronroneante.
-Dominic, en este momento, puedo darle sangre y podemos quedarnos con él. Trabajaré con él. No podemos tomar una decisión hasta que sea un poco mayor y mucho más sólido por el centro. Por lo menos tendrá una oportunidad de llevar una existencia normal.
-Sivamet. -Mantuvo su voz tan tierna como le fue posible-. Sabes que nunca habrá normalidad para él.
-Lo sé. Tienes razón. -Agachó la cabeza otra vez, mordiéndose el labio más bajo-. Nosotros no somos normales. Ninguno de nosotros. Cuidaré de él, Dominic, y si se descontrola, me apartaré cuando ocurra.
-Mírame Solange -dijo. Esta vez no había gentileza en su voz, sólo autoridad suave e implacable-. Si llega un tiempo en que crea que este animal es demasiado peligroso para ti, le destruiré sin consultártelo otra vez. No quiero que jamás digas que no te lo advertí.
Ella apartó la mirada, su expresión cerrada, aunque cuando él tocó su mente, ella no se estremeció apartándose. Él estaba rozando el borde de la capacidad de Solange para reconocer su autoridad. Le importaba poco aparte de que no le gustaba hacerla sentir incómoda. Solange era su compañera de todas las maneras, pero en lo que se refería a su seguridad, él no estaba dispuesto a ceder. Viajar con un animal tan potencialmente peligroso como el gato de sombra, cuando había sido creado para tomar específicamente su sangre, le ponía nervioso e incómodo.
Ella se humedeció los labios y él quiso inclinarse para besarla. Solange trataba de encontrar un punto medio, Dominic lo podía ver en su cara transparente, y tuvo que darle crédito por querer hacer concesiones.
-Sé que es inquietante, Dominic. Yo no estaría tratando de curarlo si no pensaba que puedo. Míralo, es tan cariñoso. Tiene la capacidad de aprender.
Él asintió.
-Eso es verdad, sivamet pero aún así es un animal con instintos.
Solange se dejó caer de rodillas al lado del gatito, todavía frotándole entre las orejas. El gato ronroneó hasta que el bosque pareció resonar con su placer. Bajó la cabeza y la golpeó con ella una y otra vez, tratando de acercarse más. Dominic suspiró. Iba a tener que esperar y ver. Sabía que sería más duro para Solange si el gatito no lo conseguía. Ella ya estaba tan enamorada de la pequeña criatura.
-Seguiré intentando que acepte mi sangre -dijo, a modo de concesión.
Ella le miró a los ojos. Le sonrió.
-¿Te he dicho que te amo? Porque lo hago.



Aclaracion-Disclaimer

La Saga Serie Oscura, es propiedad de la talentosa Christine Feehan.
Este espacio esta creado con el único fin de hacer llegar los primeros capítulos de estas magnificas obras a todos ustedes que visitan el blog. Lamentablemente, en latinoamericano muchos de estos maravillosos ejemplares, no estan al alcance de todos.
Si tienes la posibilidad de conseguir estas historias en tu pais, apoya el trabajo de Christine y compra sus libros. Es la unica manera de que se continue con la publicacion de los mismos.
Gracias por su visita
Mary